miércoles, 20 de febrero de 2008

Lectura

¿Cómo me Interesé en la lectura?

"Porque era fea, leía "La bella durmiente"; porque era hija única, leía "Mujercitas", porque era una hija descariñada, leía "Jane Eyre", porque era timorata leía "Tom Sawyer", porque era cobarde leía "Los tres mosqueteros", porque pasaba en cama enferma leía a Verne, porque le tenía miedo al mar leía a Sandokan, porque vivía entre cuatro paredes de cemento leía "Los viajes de Gulliver", porque le tenía terror al diablo, leía la vida de los santos, porque era deforme, leía "Papelucho", porque era enclenque leía "Las zapatillas rojas", porque era tonta leía los cuentos policiales, porque era floja, leía "Los trabajos de Hércules", porque era friolenta leía "El libro de las tierras Vírgenes", porque tenía el cabello negro leía "Ricitos de oro", porque desconfiaba de los mayores, leía "Papaíto piernas largas", porque no estaba enamorada de nadie leía poemas, porque no era amada por nadie leía poemas, porque pasaba aburrida leía "Alicia en el país de las maravillas", porque no había nacido reina leía "Los caballeros del rey Arturo", porque era egoísta leía "David Coperfield", porque era vanidosa leía "La Cenicienta", porque no era feliz leía "El gran Meaulnes", porque era mentirosa leía "Pinocho".
Así me convertí en lectora.

Balcells, Jacqueline: "Cómo me convertí en lectora"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno, muy bueno.

Omarcito

cintia dijo...

Adoro esta "reflexión reflexiva". También nosotras, nos convertimos en lectoras porque en palabras de Vargas Llosa "no nos resignamos a no tener las vidas que no tenemos"

Lunes por la madrugada...

Yo cierro los ojos y veo tu cara
que sonríe cómplice de amor...